Esa joven dama posee el talento más maravilloso que conozco para describir los enredos, sentimientos y personajes de la vida cotidiana. A los asuntos espectaculares me enfrento yo mismo como cualquier otro, pero el toque exquisito que dota de interés a las cosas y las personas corrientes y comunes gracias a la veracidad del sentimiento y la descripción me está vedado.
WALTER SCOTT, recogido por Carol Shields en Jane Austen, Editorial Mondadori, Barcelona, 2002, traducción de Cruz Rodríguez Juiz, pág. 183