A Derek Walcott lo conocí en el funeral de Robert Lowell. Lowell me había hablado de él y me había enseñado algunos poemas que me impresionaron mucho. "Otro buen poeta", pensé después de leerlos. Entonces su editor me pasó aquel poemario, Otra vida, y me dejó absolutamente loco. Comprendí que tenía en las manos la obra de un gigante. En la poesía anglófona, Derek es una figura comparable con, no sé, ¿Milton? (Risas) Más exactamente, lo pondría entre Marlowe y Milton, por su tendencia a escribir teatro en verso y por su vigor. Es un autor asombroso. Los críticos insisten en adjudicarle la etiqueta de autor caribeño, y es un crimen, porque es el más grande de este momento.
JOSEPH BRODSKY, entrevista de Sven Birkerts en 1982 para The Paris Review, recogida en The Paris Review Entrevistas (1953-1983), Acantilado, Barcelona, 2020, traducción de María Belmonte, Javier Calvo, Gonzalo Fernández Gómez y Francisco López Martín, pág. 1206.